A los niños muiscas de Bosa, desde muy pequeños, se les inculca el amor por la madre tierra para que aprendan a cuidarla y sanarla, y así preservar la riqueza natural de Colombia.
“Estamos enseñando al niño el cuidado de la madre tierra, el cuidado al fortalecimiento de nuestra cultura. Esto es lo importante porque esta es la semilla que queremos cuidar para que esta semilla no se nos pierda”, contó Rigoberto Neuta, sabedor ancestral muisca de Bosa.
Con la enseñanza de valores como la humildad y el respeto, los niños muiscas “van aprendiendo, van limpiando, van sanando el territorio, van sanando la humanidad, van sanando el pensamiento”, agregó Neuta.
Finalmente el sabedor invita a todos a cuidar la tierra:”Si no cuidamos nuestro alimento, ¿qué le vamos a dejar a las nuevas generaciones?, ¿agua contaminada?”
